Y el Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros, y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.@Juan 1:14
retrato
Richard S. Willis (1819–1900)

Him­no anó­ni­mo ale­mán, Mün­ster Ge­sang­buch, 1867 (Schön­ster Herr Je­su); tra­du­ci­do al es­pañol, es­tro­fas 1-3, Mau­ri­lio Ló­pez Lá­za­ro; es­tro­fa 4, Al­ber­to Rem­bao.

Cru­sad­er’s Hymn, Schles­ische Volks­lied­er, 1842; arr. Richard S. Willis, 1850 (🔊 pdf nwc).

Cristo divino,
Hijo unigénito,
Gran Creador y fiel sos­tén,
Siempre he de am­ar­te,
Siempre servirte,
Mí gozo, mí corona y bien.

Los campos bellos
Cubren el suelo
De lozanía y floración;
Jesús empero,
Siempre es más bello;
Hace cantar al corazón.

¡Bello el lucero!
¡La argentina luna!
Titilan las estrellas mil.
Jesús es bello,
Jesús es puro
Que todo el reino ce­les­ti­al.

Más que la aurora
Fulge tu rostro
Con hermosura de lirio en flor.
Magnificencia
Incomparable
Eres mi Cristo, mi Se­ñor.