¡Gloria a Dios! porque su gracia
En nosotros abundó,
Y su fiel misericordia
En nosotros se mostró.
¡Gloria a Dios! pues él no mira
Nuestra horrible iniquidad;
Bondadoso nos reviste
De justicia y santidad.
¡Gloria a Dios! a quien complace
Escuchar nuestra oración;
Y recibe nuestros cantos,
Nuestra humilde adoración.
¡Gloria a Dios! que en abundancia
Bendiciones hoy nos da;
Si esto él hace aquí en la tierra,
En los cielos ¿qué no hará?