¡Oh Maestro y mi Señor!
Yo contigo quiero andar;
En tu gracia y en tu amor
Sólo quiero yo confiar.
Eres mi profeta y rey,
Mi divino Salvador;
Soy oveja de tu grey,
Eres tú mi buen pastor.
Dime tú lo que he de ser,
Las palabras que he de hablar,
Lo que siempre debo hacer,
Cómo debo yo pensar.
Sólo así feliz seré
En mi vida espiritual.
Sólo así morar podré
En la patria celestial.